TIEMPOS PELIGROSOS
Introducción
Uno de los momentos de peligro de los discípulos de Jesús fue sin duda en medio del mar de galilea. En Marcos 4:35-41 encontramos este episodio.
¿Qué es lo que hizo posible que el Maestro se fuera a dormir en medio de la tormenta? la respuesta la encontramos en Números 23:19
En nuestro alrededor la violencia se manifiesta de muchas formas en todo el mundo. Los conflictos tribales conducen a la muerte y a serias lesiones, y las guerras sectarias y religiosas aumentan cada día.
Ellen White describió acertadamente nuestra época: “El Espíritu de Dios se está retirando de la tierra, y una calamidad sigue a otra por tierra y mar. Hay tempestades, terremotos, incendios, inundaciones, homicidios de toda magnitud. ¿Quién puede anticipar lo que vendrá?¿Qué ha pasado con la seguridad? No hay seguridad en nada que sea humano o terrenal”( El Deseado de toda las gentes, páginas 301-302).
EL PODER DE LA PALABRA
El primer sitio donde debemos ir para obtener fuerza en tiempos de tribulación es al poder de la Palabra de Dios.
¿Qué ha dicho Dios en la Biblia sobre el asunto en cuestión?¿Cómo obró la Palabra en bien de otros? leamos en Isaías 41:10
Como cristianos debemos reconocer que todos los problemas que se presentan hoy requieren de la intervención divina y el texto de Isaías nos ayuda a sobreponernos a todos ellos.
Si nos fijamos en la historia de Jesús, en Lucas 4:12 vemos la respuesta de Jesús a Satanás para defenderse de la tentación.
Si nos fijamos un poco más adelante, en Lucas 4:18 cuando él va a la sinagoga y utiliza el texto de Isaías 61:1-2, tienen que intervenir los ángeles para defenderle de la más que probable muerte anticipada porque lo querían despeñar, Lucas 4:28-30.
El mismo texto bíblico que Satanás quería utilizar para tentar a Jesús, posteriormente se confirma en la vida de Jesús.
¿QUÉ ESTAS VIVIENDO?
Esto nos lleva a preguntarnos, en ¿qué situación estamos viviendo? ¿hoy es un día difícil para ti?, la Palabra de Dios nos muestra que incluso cuando pensamos que Dios intervine tarde, Él interviene en su debido momento, en Habacuc 2:3.
Puede ser que la zona de guerra sea no de forma bélica, sino simplemente con la presión en el trabajo, para tener tus sábados libres, recuerda lo que dice el texto de Salmos 91:1-2.
Puede ser que la situación sea familiar y esas luchas a las que tienes que enfrentarte, tienes la Palabra de Dios para sostenerte, en Isaías 43:1-2
Conclusión
Queridos hermanos en este día debemos fijar nuestro ojos en Cristo, de esa forma podemos pasar por medio del crisol de las pruebas y salir victoriosos, debemos tener en nuestra mente las palabras del profeta Ezequiel 48:35
Este es mi deseo para todos en esta noche.
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